Mercado Inmobiliario
Una casa en la playa
Un inmueble costero puede ser un agradable espacio para descansar, pero también para buscar rentabilidades.
Realizar una inversión inmobiliaria en la costa es una decisión cada vez mas cotizada , sobre todo por parte de personas que proyectan su vida en un entorno más natural y con bellos paisajes.
En este sentido, innovadores y atractivos proyectos residenciales en ciudades costeras y balnearios confirman la tendencia de esta necesidad de acercarse al mar.
Ahora, claro, esto también puede ser visto como una inversión, donde las viviendas usadas están ganando gran movimiento dentro del mercado.
De esta forma, además de la posibilidad de invertir en proyectos nuevos, donde hay que
considerar todos los elementos y garantías de los que hemos hablado en columnas anteriores, es importante conocer las claves para comprar una vivienda usada en las playas.
A mi juicio, los aspectos más importantes a considerar en este caso son:
1. La zona donde está ubicada la propiedad.
2. La superficie.
3. Los materiales.
4. El número de habitaciones.
5. El estado de los artefactos y las instalaciones.
6. Las cercanías a servicios y equipamientos.
Si bien la ubicación es uno de los factores más importantes al tomar una decisión de comprar una vivienda, un aspecto no menor es el clima.
¿Por qué? Porque el mayor problema de la costa es la humedad, por lo que es fundamental fijarse que la propiedad tenga una buena orientación, que sea sólida y con buena ventilación, para que este tema no se transforme en un problema.
En ese sentido, en la playa la mejor orientación es nor-poniente.
También podemos agregar que la gente de mayor edad, busca la tranquilidad y que la propiedad quede en un lugar central, como por ejemplo Viña del Mar, donde sus necesidades más inmediatas queden cubiertas en un radio cercano.
Por otro lado está el adulto-joven que prefiere zonas como Reñaca y/o Concón, porque cuenta con edificios más modernos con baños y cocinas de última generación con comodidades como piscinas, club house o gimnasios.
Normalmente cuando se compra una vivienda usada hay que invertir una cierta cantidad de dinero en refaccionar las cosas que comúnmente con los años tienden a estropearse, o bien los nuevos propietarios quieren modernizar.
Y esto es algo que debe tomarse en cuenta a la hora de analizar la compra, más allá del precio de la propiedad, lo mismo que la mantención del inmueble.
Una vez con todos estos números hechos, recién podemos sacar la cuenta de la rentabilidad que este inmueble puede ofrecernos a la hora de ponerlo en el mercado en formato de arriendo, lo que nos puede dar una rentabilidad de alrededor de UF + 6-7%.
“El mayor problema de la costa es la humedad, por lo que es fundamental fijarse que la propiedad tenga una buena orientación, que sea sólida y con buena ventilación, para que este tema no se transforme en un problema.
Fuente: Revista Inversor Global
Fecha: Noviembre de 2014